Madrid, 27 may (EFE).- La Junta de Accionistas de Enagás ha aprobado hoy en reunión ordinaria las cuentas del año 2020 y ha reafirmado su compromiso con la transición ecológica y el empleo.
El presidente de Enagás, Antonio Llardén, ha hecho público que han reducido, desde 2014, sus emisiones de gases de efecto invernadero un 63,2 %.
El directivo ha manifestado que “una transición justa” debe reconocer el papel de los territorios “más afectados por la transición energética”, generando empleo sostenible y haciendo “más competitiva” la industria española.

55 proyectos para cumplir con la transición energética
Además, la compañía energética ha presentado un total de 55 proyectos (34 de hidrógeno verde y 21 de biometano) a las diferentes partidas de interés establecidas por el Gobierno de España para los fondos ‘Next Generation’.
El consejero delegado de Enagás, Marcelino Oreja, ha detallado que la compañía “lleva años trabajando en proyectos de gases renovables tanto de hidrógeno verde como de biogás”, basado en tres herramientas: innovación y desarrollo, emplear tecnología ya construida y contar vías de financiación para las fases de implementación tempranas.
En cuanto al biometano, ambos han considerado que es “un recurso energético menos conocido e infrautilizado en España”, pero que tiene un “enorme potencial para la descarbonización”, sobre todo, en zonas despobladas.
Enagás cuenta con proyectos de gases renovables en las Comunidades Autónomas que suponen alrededor de 6.000 millones de euros de inversión conjunta.
El futuro mira a la descarbonización
Sobre los objetivos cumplidos por la empresa, la nota de prensa ha destacado el control de gastos operativos y financieros y la aportación de 174,8 millones de euros de las empresas participadas -casi un 8 % más que en 2019-.
Para Llardén, tomando como referencia el “contexto actual”, la entidad tiene como prioridad “trabajar por la reconstrucción y por un futuro que no deje a nadie atrás”.
A medio plazo, desde el punto de vista estratégico, el presidente ha considerado que los activos regulados en España, que cuentan con un marco regulatorio estable hasta 2026, tendrán un futuro vinculado al proceso de descarbonización. EFE